Los dispensadores cada vez son más frecuentes en los baños y en otros servicios públicos. Si no quieres uno de toalla, puedes usar uno eléctrico.
Hay dos tipos de dispensadores, de papel higiénico y de papel de toalla.
Las ventajas que posee un dispensador de toalla son simplemente energéticas, ya que, no requiere ninguna toma a la corriente. El dispensador de toalla simplemente tiene mantenimiento, intercambiar el papel.
Sin embargo, si no quieres realizar ningún mantenimiento, el dispensador eléctrico es tu solución.